Llaman por teléfono hace dos noches a mi casa, ya era un poco tarde y yo me disponía a acostarme, muy apresurado y algo confundido contesté. Era Humberto Barreto, Después de su clásica introducción me dió a conocer una noticia que me preocupó mucho: El accidente automovilístico de nuestro amigo de promo Luchito Fernández, más conocido en el ambiente como "Ricky Fernández".
Me hizo mención de un correo de Walter Palomino alertando a algunos de la promo sobre este suceso y que yo no conocía por no haber estado frente a la computadora. Sabía que Ricky se encontraba desde hace algunos años en Las Bahamas en centroamérica, trabajando en la industria hotelera y turismo de estas islas de Las Antillas. No tenía noticias de él desde que estuvo hace algunos años.
Resulta que después del accidente fue repatriado y ya se encuentra en su casa en San Juan. Fuimos a visitarlo ayer y nos encontramos despues de seis años, cuando se dió unas vacaciones al Perú. Me acuerdo que en aquella oportunidad su visita coincidió con la del Maestro Santillán y la verdad que la pasamos muy bien. También de su participación en las celebraciones por nuestras Bodas de Plata de Pablo VI.
Al llegar a su casa lo encontramos postrado en cama casi inmovilizado con "clavos" en sus dos piernas. Practicamente teníamos delante de nosotros a un Ricky "biónico" y es un milagro que esté con nosotros ya que el accidente automovilístico fue frontalmente y él recibió la peor parte, tanto que se demoraron mas de tres horas en poder sacarlo de su vehículo que quedó practicamente inservible. Este lamentable suceso ocurrió hace tres meses atrás y desde entonces no le fue muy bien con el tratamiento, muchos problemas tuvo que afrontar hasta que consiguió la repatriación y felizmente lo tenemos con nosotros y sobre todo está al lado de su familia. Nos contó también que no desea que esto le pase a nadie. Después del accidente su vida a dado un vuelco de 180 grados. Ya no es el mismo, el trauma psicológico todavía no se aleja de él. El maltrato a los extranjeros en Bahamas es hasta cierto punto criminal, mas aún sin la documentación en orden.
Conocemos de su trayectoria como "dandy" y soltero incorregible. "No ha nacido todavía la mujer que le haga comer de su mano", pareciera su lema. Siempre dueño absoluto de su tiempo se siente muy orgulloso de su total independencia. Claro está que en las actuales condiciones necesita de mucho valor y fe para sobreponerse de este amargo trance. Ahora que no puede valerse por sí mismo se siente impotente de no ser el de siempre y los momentos de depresión se aparecen de un momento a otro. Sin embargo no pierde las esperanzas que algún día todo cambiará. Nos dijo que los médicos de allá le han dicho que serán muchos meses de rehabilitación, que pueden ser años, y que existe la posibilidad de no recuperarse del todo. Ya esta recibiendo aquí en Perú tratamiento y luego de su rehabilitación -que de seguro será muy titánica y fuerte- Ricky estará haciendo de las suyas como siempre.
Al llegar a su casa lo encontramos postrado en cama casi inmovilizado con "clavos" en sus dos piernas. Practicamente teníamos delante de nosotros a un Ricky "biónico" y es un milagro que esté con nosotros ya que el accidente automovilístico fue frontalmente y él recibió la peor parte, tanto que se demoraron mas de tres horas en poder sacarlo de su vehículo que quedó practicamente inservible. Este lamentable suceso ocurrió hace tres meses atrás y desde entonces no le fue muy bien con el tratamiento, muchos problemas tuvo que afrontar hasta que consiguió la repatriación y felizmente lo tenemos con nosotros y sobre todo está al lado de su familia. Nos contó también que no desea que esto le pase a nadie. Después del accidente su vida a dado un vuelco de 180 grados. Ya no es el mismo, el trauma psicológico todavía no se aleja de él. El maltrato a los extranjeros en Bahamas es hasta cierto punto criminal, mas aún sin la documentación en orden.
Conocemos de su trayectoria como "dandy" y soltero incorregible. "No ha nacido todavía la mujer que le haga comer de su mano", pareciera su lema. Siempre dueño absoluto de su tiempo se siente muy orgulloso de su total independencia. Claro está que en las actuales condiciones necesita de mucho valor y fe para sobreponerse de este amargo trance. Ahora que no puede valerse por sí mismo se siente impotente de no ser el de siempre y los momentos de depresión se aparecen de un momento a otro. Sin embargo no pierde las esperanzas que algún día todo cambiará. Nos dijo que los médicos de allá le han dicho que serán muchos meses de rehabilitación, que pueden ser años, y que existe la posibilidad de no recuperarse del todo. Ya esta recibiendo aquí en Perú tratamiento y luego de su rehabilitación -que de seguro será muy titánica y fuerte- Ricky estará haciendo de las suyas como siempre.
Recordemos al amigo de siempre y hagamos un poco de historia. Ricky nace en Lima un 20 de abril de 1961, pertenece a una hermosa familia muy sólida y solidaria; él y su hermano mayor Eduardo estudiaron en el Maristas San Juan. Aunque Fernández pertenecía a una promo anterior a la nuestra, siempre se distinguía del resto del grupo por su perculiar caracter. Es en 1975 que se "asimila" a los nuestros y su integración al grupo fue óptima. Lo recuerdo flaco, sus cabellos cubriendo su frente; con un caminar de estilo vanguardista a lo "turry" de ahí que sale otro alias para él. Irreverente, sincero y con una pose de autosuficiencia y seguridad extrema mismo "Arthur 'Fonzie' Fonzarelli "(Henry Winkler) de la antigua serie americana Happy Days (Días Felices) personaje que aunque al principio fue un secundario, se convirtió en el personaje más popular de la serie.
Y así era Ricky, no aguantaba las mariconadas, ni la falsedad, siempre directo en sus relaciones con los demás. Muy esquisito en sus modales y ordenado. Gustaba del dibujo -me acuerdo que hacía muchas caricaturas a lapicero- mientras que el fulbito era su devoción, siempre en el recreo un poco de peloteo no le caía nada mal. Así era Ricky Fernandez y algo de eso queda en la actualidad. Otra de sus cualidades era su don para la música, era muy diestro con la guitarra y junto con Miltón nos deleitaban de su arte en cada ocasión. Un estilo muy ortodoxo de ejecutar canciones en todos los estilos muy a su manera. Sus manos ahora no le responden por el accidente; sin embargo es cuestión de meses y él estará nuevamente al lado de su guitarra.
Termina el colegio y estudia creo contabilidad, de allí pasa de un trabajo a otro. Ustedes saben que en la década de los ochentas el Perú vivió mucho desorden y fuimos presos del terrorismo, de la inestabilidad y de la inflación. Es aquí que el Ricky decide abandonar el Perú y buscar nuevas expectativas fuera del país. Llega a Venezuela en 1991, las cosas no iban tan bien pero se traga su orgullo y le da pa' delante en diferentes oficios. Los tres ultimos años de los noventa trabaja al lado de un empresario petrolero que se convierte en su amigo y protector. Es aquí que su hermana lo invita a Las Bahamas y alista sus maletas para iniciar una nueva vida al lado de sus familiares en centroamérica. Desde comienzos de siglo Ricky se dedicó a trabajar para la industria hotelera -ya que este país vive solo del turismo. Es aquí que conoce a una morena que "flecha" su corazón. Después se vuelve independiente y trabaja por su cuenta en labores de manteniemiento de hoteles y afines. Su vida parecía que ya estaba escrita en Las Bahamas hasta el accidente. Nos cuenta que días antes decide viajar a Perú para vacacionar, sin presagiar el fatal desenlace.
Volviendo atrás diremos que mientras estuvo aquí durante parte del 2003 compartió con la promoción de algunas actividades que se organizaron con motivo de celebrar nuestras Bodas de Plata de egresados del colegio, entre ellas participó en las jornadas deportivas, de los paseos familiares y de algunas salidas con los muchachos de la mancha. Es aquí que en algún momento coincide con Alfredo Santillán en algunas veladas amicales.
Me acuerdo que a comienzos del 2003 salimos un grupo de amigos, entre los cuales estaba él y el Maestro Santillán. Fuimos a un local en San Isidro al medio día y salimos casi al caer la tarde. En aquella oportunidad les confiaba a los astentes del próximo nacimiento de mi segundo hijo, después de 14 años de nacido mi primogénito. Fue tanta la alegría de ese momento que nos tiramos una señora "bomba" al compás de deliciosos pisco sours en su versión "catedral". Fue inolvidable aquel encuentro.
Postrado en cama sin poder moverse le hemos sugerido que escriba alguito para el blog. Ayer nos bombardeó con muchas anécdotas durante horas y todavía tiene mucho que compartir. Realmente hacemos votos para que nuestro estimado y querido "Ricky Ricón peruano" se restablezca y quede como siempre, que nos brinde aquel buen humor que siempre lo ha caracterizado y que también deje la soltería de una vez.
Paco Cárdenas Linares
el amigo de siempre ,el que cuando jugabamos pelota en el colegio tenia sangre de pato,fria ,con personalidad de nervio templado, un amigo que solo era el ricky ricon,aquel que siempre esta con nosotros sabemos que el saldra adelante buen humor es lo que le sobra.
ResponderEliminarganas de continuar con los que lo queremos esta demas en su corazon decir que tenemos a ricky para rato
un abrazo con el afecto de siempre
tu amigo de siempre