Un momento, no se trata de la famosa película del mismo nombre de 1958 protagonizada por Paul Newman y Elizabeth Taylor, o la de 1976 con Robert Wagner y Natalie Wood, o la de 1985 con Tommy Lee Jones y Jessica Lange, sino de un relato que me lo hicieron recordar en el último viaje a Tarma en el mes de Junio, y es a petición de ellos que a continuación lo doy a conocer:
Era mediados del último año del Colegio en el curso de Ciencias Naturales teníamos como tarea: disecar un animal doméstico. Para empezar todos los grupos ya estaban formados y completos, así que fue ese desamparo general que teníamos en común es que decidimos hacer grupo Daniel “el zapatón”, Alfredo “el maestro”, Aníbal “kato” y Yo.
En primer lugar teníamos que elegir un animal doméstico, la verdad es que cualquiera que estuviera dispuesto, así que una tarde salimos a buscarlo y fue que íbamos tocando puertas, casa por casa preguntando si no tenia algún animal que no le sirviera, por su puesto con los respectivos portazos fue pasando la tarde, hasta que llegamos a la casa de unas chicas que nos dijeron que si queríamos una gata que tenia en su casa debíamos atraparla y ya era nuestra (creo que no era su gata por eso nos la regalaron) así que sorteamos quien se encargaría de ese acto heroico, los elegidos eran Alfredo y Aníbal, mientras tanto Daniel y Yo esperaríamos en la puerta hasta que ellos cumplan su misión, y fue así que después de un buen rato y de un sin numero de gritos de toda índole salen triunfantes con la gata en un costalillo, pero ellos con muchos arañazos que cariñosamente les había dejado la gata, que había vendido muy cara su libertad.
El siguiente paso era sacrificarla, de ese acto se encargaría Daniel, pero el se oponía a la disección de los animales, pero también era nuestra nota que estaba en juego, Yo me encargaría de la disección en si que lo haria en el laboratorio del colegio.Ya se terminaba la tarde y empezaba la noche así que Aníbal consiguió jeringa y aguja descartable para inyectar al animal, pero no teníamos las sustancia letales que había que aplicar así que Alfredo cargo la jeringa con acido muriático, pero Daniel seguía oponiéndose a continuar con el trabajo, y nos instalamos en un parque frente a la casa de Alfredo.
Aníbal: voy a inyectarla ¡y jjjaaag!
Y se doblo la aguja, habría chocado con algo duro.
Aníbal: ja ja ja ja ja falle.
Daniel: muchachos piensen en los derechos de …
Martín: oye “moroco” Daniel es nuestra nota de ciencias la que esta en juego.
Aníbal: jajajajajajajaja
Alfredo: oye “zapatón” Daniel te sacamos del grupo si sigues protestando.
Aníbal: jajajajajajaaja
En eso Alfredo como era el mas interesado por que tenía la nota mas baja en la materia se decide a inyectar a la gata,
Alfredo: acá tengo otra aguja ¡y ajjjagg!
Aníbal: jajajajajajajaaja
Y acertó logrando colocarle todo el contenido de la jeringa, para esto desde una esquina nos habían estado observando una pareja de ancianos todo lo que hacíamos y nos resondraban pero en ese momento no entendíamos los que nos decían, cuando en un descuido, la gata vuelve a la vida y se nos escapa...
Aníbal: jajajajajajaja
Martín: a “kato” Aníbal le ha dado un ataque de risa.
Y la gata se trepa en lo alto de un pino que justo estaba en el jardín del par de viejitos que nos resondraban, al dirigirnos a su jardín ha rescatar y recuperar nuestra gata, nuestra nota en Ciencias Naturales, dichos ancianos nos sorprenden y amenazan con llamar a la policía, pero simultáneamente mientras recibíamos la llamada de atención miramos a lo alto del pino y la gata iba cayendo de rama en rama hasta que Alfredo estira el brazo y lograr atrapar a dicha gata antes que toque el suelo, y nos retiramos antes de que llegue la policía. El siguiente paso era dejar al animal en un lugar fresco o una refrigeradora, ninguno quería ofrecer su refrigeradora para albergar a dicho cadáver, así que levantamos la mirada y vimos que en nuestra zona existe un cerro bastante alto y fresco y que además se podía observar desde el patio del colegio, es así que decidimos dejarlo en lo alto del tanque de agua del cerro ASOMUFA, con sus respectivos distintivos para vigilarla desde el Colegio, ya eran casi las 10 pm. de la noche así que dejamos la bolsa y nos retiramos a nuestras casa.
Al día siguiente desde la formación en el patio del colegio hacíamos turno para vigilarla y no le quitábamos la mirada a dicha bolsa pues esa era nuestra nota grupal del trabajo, los demás compañeros no sabían por que observábamos todo el día al cerro Asomufa, pues temíamos que alguien que pase por ahí podía hacer un macabro descubrimiento y estaríamos “fritos” y desaprobados de nota, por que faltaban pocos días para la presentación de la disección.
Y nuestro amigo Julián se acercaba a nosostros y nos preguntaba.
Julián: ¿Qué tanto mirarán al cerro?
Martín: Observamos al Extraterrestre que se bajado del OVNI en el cerro.
Julián: ¡No te lo puedo creer!, será Gazú, pero por si acaso en la tarde iré a investigar.
Martín: no vayas, hoy no recibe visitas
Julián: Ok
En la tarde traemos al laboratorio a la occisa gata y empezamos a disecarla; habíamos comprado azufre, algodón industrial para rellenarla, ojos, alambre para el armazón entre otras cosas, el olor era horrible al extremo que una madres de familia que estaban haciendo manualidades en un salón adyacente salieron despavoridas, igualmente las chicas de 5to año (de nuestra promoción) que estaban al otro lado haciendo cocina y que nos habían estado molestando también de pronto ya no estaban. Recuerdo que minutos antes se escuchaban unos gritos tipo concierto en el salón adyacente que practicaban el “curso de cocina”, ¿que había pasado? ¿ era su primera vez? ¿Pero de que? Su primera vez que freían un HUEVO, ¿Vaya que novedad? En el futuro cuando ya casadas les iba “tocar” hacer todos los días.
Dos chicas estaban por el laboratorio curioseando que hacíamos pero al percatarse de que íbamos a iniciar el trabajo de Ciencias Naturales disimuladamente se retiraron mas rápido que inmediatamente. Empezamos el trabajo con cortes tipo forense, tratando en lo posible de seguir los protocolos establecidos en el curso. Lo que mas nos costo trabajar fue la cabeza por los pequeños divertículos que hay, además de entablar una guerra con las pulgas que tenia la gata gris, que yo recuerde Alfredo y Aníbal ayudaron ¿pero Daniel? Se la pasó incriminando sobre los derechos y tanta cosa, que le pedíamos que guarde silencio, diciéndole que lo sacaríamos del grupo y se quedaría sin nota.
Llegó el día de la presentación de la Gata, otros grupos habían disecado animales mas pequeños palomas cuyes gatitos etc., pero nuestra gata parecía un leopardo por el tamaño con unos ojos que Alfredo se había esmerado en colocarle que parecía viva la gata, por si acaso la habíamos clavado en una base de madera por si resucitaba, nuestro trabajo estaba plagado de ciertas defectos técnicos en la presentación pero obtuvimos lo que queríamos una nota y estábamos satisfechos, el trabajo se lo llevaron a la dirección del colegio, no se para que me imagino que para exhibirlo, pero pronto empezaría a dar mal olor pues la gata no solo asustaba sino también apestaba, y no estaba sola, estaban sus inquilinas: las Pulgas, es así que el director ordena que saquen ese animal de la dirección y lo regresa al salón pero ahí tampoco lo querían y terminan colocándola en el techo del salón , y en ese momento el trabajo pasó a llamarse “Una Gata sobre el tejado”.
Recuerdo sin temor a equivocarme que fue el animal más grande que se diseco en el curso, no solo por el tamaño sino por que pesaba con todo el relleno y alambres que se le había colocado.
Nuestro trabajo termino en el tejado por no se cuanto tiempo después de un tiempo, la dejamos de ver, cual seria su destino? en donde terminaría? Rpta: pues si terminaría en donde ustedes se están imaginando…
En años anteriores habíamos hechos practicas simples con palomas, ranas, pollitos etc. cosa que nos ayudo a desenvolvernos mejor, aun mas para los que mas adelante continuaríamos estudios dentro del área de Ciencias Medicas, Farmacológicas, etc..
Las dos hermanas desconocidas que nos “obsequiaron la gata” años mas tarde coincidiríamos en un curso de administración que lleve, y nos haríamos buenos amigos, hoy en día son las felices esposas de un compañero de nuestra promoción y de su hermano.
Las dos chicas de 5to año que merodeaban por el laboratorio, meses después serian unas muy buenas amigas sobre todo una de ellas muy cercanas a mí al finalizar el colegio.
Este fue un relato al pie de la letra de lo que sucedió aquella vez, esperando no haber afectado susceptibilidades de ninguna índole.
Hasta la próxima.
Atentamente.
Martín Orellana M.
Te pasastes, pulpín. Me hiciste reir un montón conforme leía tu artículo.
ResponderEliminar...ese relato al pie de la letra de lo que sucedió aquella vez no lo he olvidado, fué hermoso, pues sabes que me quitó el sueño, sinceramente yo también espero no haber afectado suceptibilidades de nínguna índole...
ResponderEliminar