En varias partes del mundo (la mitad, específicamente) el invierno está cómodamente instalado. Con él vienen las lluvias, las nevadas, el viento y el mortífero frío que hiela hasta los huesos. Y la llegada del invierno no sólo se asocia con sensaciones térmicas, sino que con varios problemas de salud.
Gripes, resfriados, congestiones nasales… ellos y sus parientes pesados (las neumonías, pulmonías, asma, bronquitis, etc.) son normalmente asociados a esta estación, y por ello fortalecer el sistema inmune es la mejor manera de prevenirlas.
Conocemos los consejos generales para mejorar su actividad. Estos son una buena alimentación que incluya muchas vitaminas y minerales variados, acompañada de actividad física que nos permita mantenernos en forma. Además, es importante descansar lo suficiente (entre siete u ocho horas de sueño diarios) para así recuperar energías.
Pero vayamos más allá de ello y focalicémonos en nuestra actitud. Mantener una mentalidad positiva y olvidándonos del estŕes y las preocupaciones triviales podremos contar con un escudo contra las enfermedades. Así, podemos enfrentar la estación con una actitud mentalmente sana que nos fortalezca y nos permita prevenir las enfermedades asociadas al invierno.
Pero vayamos más allá de ello y focalicémonos en nuestra actitud. Mantener una mentalidad positiva y olvidándonos del estŕes y las preocupaciones triviales podremos contar con un escudo contra las enfermedades. Así, podemos enfrentar la estación con una actitud mentalmente sana que nos fortalezca y nos permita prevenir las enfermedades asociadas al invierno.
¿Cómo conseguirlo? Bien, las técnicas de relajación son un buen método para ello. Puedes recurrir al yoga, la meditación, o incluso a la hipnosis. La terapia de visualización es otra buena herramienta para ello, y el reiki tal vez sea la más efectiva.
Lic. Carmela Fernandini Artola
Fuentes
Vivir salud
Immunity Challenge - Vital Juice
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