MARISTAS BOYS 78

 

CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO

EL ANUNCIO DEL ÁNGEL A JOSÉ

"Porque él salvará a su pueblo de sus pecados.”

Por el P. Clemente Sobrado

 

San Mateo 1, 18 - 24:

El nacimiento de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo. Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Cuando apenas había tomado esta resolución, el ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: “José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque la criatura que hay en ella es del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.” Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta: Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que significa: “Dios con nosotros.” Cuando José se despertó de su sueño, hizo lo que el ángel del Señor le había mandado, y se llevó a su casa a su mujer.

 

Reflexión 

Queridos amigos: Como veis un Evangelio que puede poner a prueba la fe de cualquiera. La Encarnación de Jesús no estuvo carente de problemas y dificultades humanas. A nosotros todo nos parece todo fácil. El Ángel anuncia a María. María acepta, pero ahora vienen los líos con José su esposo. Sorpresivamente, José se da cuenta de que María está embarazada, es consciente que él no ha convivido con ella. Por lógica humana uno solo puede pensar en un adulterio, José no quiere pensar eso de María, la conoce demasiado, pero sus ojos tampoco pueden negar lo que están viendo.

¿Os dais cuenta del problema psicológico y espiritual de José? ¿Quieren ustedes ponerse en una situación igual? ¿Qué pensarías y qué decidiríais?

 

Cuando está ya para meterle bajo la puerta el libelo del repudio, el Angel se aparece a José y le dice que lo de María es sencillamente obra del Espíritu Santo, que lo que ella espera es totalmente obra de Dios. ¿Cree alguien que es fácil creer en ello cuando todos sabemos cómo se hacen los hijos y cómo vienen los hijos al mundo?

Sin embargo, José al igual que antes María cree y se fía de la Palabra del Angel. María creyó sin entender, José también cree sin entender nada. Aquí todo se mueve en el plano de la Palabra y de la fe en la Palabra.

¿Alguien cree ya en la Palabra hoy? ¿Tú te fiarías de la palabra de tu esposa o de tu hija? Aquí no hay documentos firmados. No hay documentos notariales que atestigüen la veracidad de la palabra del Ángel; sin embargo, aquí hay dos: María y José que creyeron sin ver, creyeron en la Palabra de Dios, se fiaron de la Palabra de Dios sin exigir ni firmas ni pruebas. María dijo al Angel: “Hágase en mí según tu palabra.” José obedeció a la palabra del Angel y “se llevó a casa a su mujer”. Misterio de la palabra. Misterio de la fe. Creer fiándose sencillamente de la Palabra de Dios.

Linda y maravillosa manera de mirar a la Navidad donde Dios se hace Palabra encarnada. Desde nuestra fe también nosotros hoy saludamos a Dios con unos “Buenos días, Señor”.

NOTA: Si deseas escuchar el programa completo vía RRP haz click aquí

 

Fuente:

La Iglesia que camina