OPINIÓN SOBRE EL PROYECTO DE LEY 736/2011 QUE REGULA LAS CONDUCTAS DESINHIBIDAS Y OBSCENAS DE LOS ESCOLARES A INTERIOR Y EXTERIOR DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS
El Congresista Gian Carlo Vachelli ha presentado el proyecto de ley 736/2011 que “Regula las conductas desinhibidas y obscenas de los escolares a interior y exterior de las instituciones educativas”.
El título mismo de la ley es ambiguo, pues las apreciaciones sobre conductas desinhibidas y obscenas varían. ¿Es obsceno besarse en la calle o al interior del plantel? ¿Considerarán algunos que es obsceno el que vayan agarrados de las manos en el patio?
La exposición de motivos se refiere fundamentalmente a las reuniones de adolescentes llamadas “Tonos Peras” o “Peras malogradas”, en las cuales adolescentes consumen licor y desarrollan actividades de tipo sexual: bailes, juegos, frotamientos, que en muchos casos culminan en relaciones sexuales e incluso en embarazos no deseados y transmisión de enfermedades por transmisión sexual.
La preocupación del congresista es loable, pero el proyecto de ley refleja desconocimiento de la realidad educativa y no sirve para solucionar el problema que lo preocupa; pongo algunas consideraciones para ilustrar esta aseveración:
a) El problema aludido es un problema social que no se resuelve con leyes; hay en los peruanos en general, no solo en el Congreso, la convicción que en cuanto hay un problema hay que poner una ley, y con eso se soluciona todo. La legislación peruana es profusa, y eso no mejora la situación social.
b) Lo propuesto específicamente por este proyecto de Ley no ayuda en nada a solucionar el problema. Lo que propone el numeral 4.1. ya se hace: el Ministerio de Educación da normas desde la Dirección de Tutoría y Orientación Educativa. Las sanciones que propone el numeral 4.2 ya están establecidas en los reglamentos internos de cada Institución Educativa. El registro de incidencias propuesto por el numeral 4.3 no existe, pero tampoco debería existir; ya hay por Ley anterior un registro sobre casos de abuso; a este paso van a establecerse por ley todo tipo de registros que van a aumentar la carga burocrática de los directores y docentes quitando el tiempo que debe dedicarse a la labor educativa. En todo caso cada colegio lleva ya, o deber llevar, su registro de incidencias a nivel general; no tiene sentido un registro nuevo.
c) Lo dispuesto por el Art. 5º no es realista. Ya está mal que el sicólogo sea contratado solo para evitar la violencia y el abuso, como dice la ley citada en el artículo. La labor del sicólogo es más amplia e integral; asignarle de modo específico atender a los alumnos con “conductas desinhibidas y obscenas” es condenarlo a tratar no tener una acción integral, que es la única que puede prevenir las inconductas.
d) Además se debe tener claro que un sicólogo escolar no hace “tratamiento” a los alumnos del plantel en que trabaja. Su labor es de orientación a los docentes, de evaluación de grupos y de personas, de lineamientos para los alumnos, de entrevistas para conocer, pero nunca de tratamiento porque contamina su trabajo en el colegio. El tratamiento individual lo hace un profesional ajeno a la dinámica colegial.
e) Lo dispuesto en al Art. 6º lo hacen las escuelas en su trabajo cotidiano; y las que no lo hacen ahora, con la normatividad vigente, no lo van a hacer porque se promulgue esta ley.
f) El Art. 7º revela desconocimiento de los que es el CONEI. Esta institución no se reúne con frecuencia, y su rol es de lineamientos a labor general del colegio, de evaluación de la vida institucional, pero no de ejecución de acciones, que le tocan al Director, el personal directivo y los docentes.
g) Por último las autoridades policiales cuando intervienen a menores informan a sus familias, pues son ellas las que tienen autoridad sobre el menor cuando no está en el local escolar. No es mala idea que informen al colegio para que tenga conocimiento, pero eso se puede disponer con un oficio, no es necesaria una ley.
Por Juan Borea Odría
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si deseas, déjanos tu comentario