Cuando estábamos en el colegio, un grupo de músicos cara pintadas hacían de las suyas mostrando todo su arsenal de talento en su peculiar estilo de hacer música. KISS, nombre de este grupo de rock que ayer visitó por vez primera Lima con mas de 30 años de atraso.
Hablar de este grupo de rock -que pertenece al Glam rock y otros lo consideran serios exponentes del Heavy metal- es recordar a Coco Cotrina o a César Romero con sus Lps bajo el brazo de tono en tono loqueándose hasta el hastío con las fuertes notas y gritos de este grupo de pintarrajeados que con el paso de los años desarrollan un gran espectáculo muy profesional y brindan toda su calidad musical a donde vayan. Esta vez fue el turno para el Perú...cuando será que las estrellas top vengan en el mejor de su momento por aquí? me imagino que con el tiempo.
El concierto del martes 14 fue espectacular, con movimientos perfectamente coreografiados, Gene Simmons, Paul Stanley, Eric Singer y Tommy Thayer hicieron una conexión instantánea con sus fanáticos peruanos. Realmente espectacular. No se puede caracterizar de otra manera el mega concierto que la legendaria banda de rock Kiss ofreció en el Estadio Nacional. Con un despliegue técnico nunca antes visto en nuestro país, lleno de fuegos artificiales, efectos visuales y miembros de la banda volando por encima de los más de 32 mil asistentes. Tal y como se había confirmado, Gene Simmons realizó su acostumbrado derramamiento de sangre por la boca para, después de ratificar su apodo de "el demonio", volar hacia una tarima ubicada a varios metros del escenario y cantar "God of Thunder". Después de un unísono coro de repetidos "Gene", más una barra que hizo un eco de "Simmons"; el legendario bajista de Kiss quedó gratamente sorprendido por el cariño del público y no hizo más que decir un sentido "gracias". Antes en un simbólico agradecimiento , "el chico estrella" portando la bandera peruana agradeció a la multitudinaria concurrencia.
Después de deslumbrar al público con el repertorio que han venido utilizado durante el transcurso de su gira "Kiss Alive/35", el Estadio Nacional explotó definitivamente al escuchar los primeros acordes de "Rock n Roll All Night", que fue acompañada por un interminable y denso montón de pequeños papeles blancos que empaparon a los asistentes del lugar más cercano al escenario de los músicos. La también conocida "I Was Made for Loving You" fue uno de los temas finales que la banda tocó durante las 2 horas de concierto, junto a "Shout It Out loud", "Lick It Up", "I Love It Loud" y "Detroit Rock City", con el que cerraron el magistral show.
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