¿CIUDADANOS ELECTORES O CONSUMIDORES DE PROPAGANDA?
El jueves 19 se difundió en los noticieros imágenes patéticas que deben poner en alerta a quienes tercamente intentamos hacer de la política un servicio a la sociedad, y no una actividad lucrativa. Aparecía en la pantalla la imagen de un mitin electoral: pero no con propuestas políticas ni mensajes; el escenario lo ocupaban, disfrazados de músicos chicha, un grupo de candidatos a alcaldes "tocando" instrumentos de percusión acompañados de un grupo de cumbia tropical (los que de verdad sostenían la actuación).Lo patético no es sólo lo grotesco del montaje, sino lo que pone de manifiesto: los publicistas que diseñan esa campaña parten del supuesto de que "eso es lo que les gusta a la gente", y que el promedio de la población vota no por propuestas ni por la trayectoria de las personas, sino por el "producto" que la empresa publicitaria elabora.
Lo peor es que probablemente tengan razón: en un contexto de ciudadanos de verdad, los asistentes al mitin hubieran considerado el espectáculo como un insulto a su dignidad y su inteligencia y lo hubieran rechazado con cólera por ser considerados minusválidos mentales; no hubo sin embargo nada de eso, los asistentes seguían con entusiasmo el ritmo. Hay antecedentes cercanos, como el "ritmo del chino" de Fujimori, o García bailando "La vida es un carnaval" el 2006.
En una sociedad integrada por personas normales una campaña electoral debería ser un período en el cual los ciudadanos reciben varias propuestas de cómo gobernar la ciudad, estudian si los candidatos y sus equipos podrán ejecutarla, y emiten un voto consciente. Parece que cada vez más dejamos de ser ciudadanos electores y que nos vamos convirtiendo en seres acríticos y consumidores de propaganda; por ello invoco a quienes leen estas líneas a hacer lo que está a nuestro alcance para revertir esta tendencia, que de continuar acentuándose llevará a nuestra política y a nuestro país a un profundo mar de indignidad y de esclavitud, porque solo las personas dignas aprecian y luchan por la libertad.
Juan Borea Odría
En una sociedad integrada por personas normales una campaña electoral debería ser un período en el cual los ciudadanos reciben varias propuestas de cómo gobernar la ciudad, estudian si los candidatos y sus equipos podrán ejecutarla, y emiten un voto consciente. Parece que cada vez más dejamos de ser ciudadanos electores y que nos vamos convirtiendo en seres acríticos y consumidores de propaganda; por ello invoco a quienes leen estas líneas a hacer lo que está a nuestro alcance para revertir esta tendencia, que de continuar acentuándose llevará a nuestra política y a nuestro país a un profundo mar de indignidad y de esclavitud, porque solo las personas dignas aprecian y luchan por la libertad.
Juan Borea Odría
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ALLI TENEMOS EN GRAN SONRISA EN PROVINCIA A DON MUFA, DESEANDO VOLVER A SER PRESIDENTE REGIONAL Y A KEIKO, VESTIDA DE PAISANA,ES LAMENTABLE COMO ADQUIEREN OTRA PERSONALIDAD LOS POLITICOS,TODOS SON JOVIALES Y SALEN SONRIENTES EN LAS FOTOS ,DESPUES SE DESDIBUJAN
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