TODAS LAS AUTORIDADES SON PARTE DEL ESTADO
Los conflictos suscitados en las últimas semanas a lo largo del país nos dan pie para hacer una reflexión sobre el papel de las autoridades. Pareciera que en los momentos críticos los únicos que representasen al Estado peruano son las autoridades nacionales; y las regionales y locales brillan por su ausencia. Esa concepción obedece a siglos de centralismo que ha ido marcando el subconsciente colectivo de la gente. Obedecen también al tratamiento que dan a la noticia los medios de comunicación, para los cuales alcaldes y presidentes regionales son dignos de aparecer sólo cuando hay escándalos.
Tomemos el caso, por ejemplo, de lo sucedido en un caserío de Cajamarca con los niños intoxicados. Más allá de errores políticos que no es del caso comentar, la responsable de todo eso no es la Ministra del sector, sino las autoridades de la región o el municipio. Los Ministerios tienen la labor normativa, de orientación, pero la ejecución se da en las regiones. Otro ejemplo: en el gobierno de Toledo, cuando yo era Jefe del Gabinete de Asesores del Ministro Sota, se suscitó un problema con profesores del Callao, quienes acudieron al Ministerio e incluso se cortaban los brazos para remarcar sus reclamos. Yo salí a los medios a decir que el Ministerio no podía hacer nada, pues la última instancia administrativa según Ley es el gobierno regional, y luego viene la vía judicial. Sin embargo ellos seguían insistiendo con el Ministro.
En algunos de los conflictos vividos hace poco (Cajamarca, Madre de Dios, Huancavelica…) había protagonismo de quienes encabezaban las protestas y la autoridad central. Los gobiernos regionales en ocasiones se ponían de costado, en otras formaban parte del sector que reclamaba olvidándose que ellas tienen responsabilidad de resolución.
Es necesario recuperar en el imaginario popular y el sentido común político (en la ley las responsabilidades están definidas) el importante papel que juegan las autoridades locales y regionales. Se ha ido avanzando desde que iniciamos el proceso de descentralización, pero hay que seguir profundizando para tengamos un país fuerte, unido, en base a regiones y municipios con capacidad de acción.
Juan Borea Odría
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