VITIS: ACOGEDOR, BELLO Y NOSTÁLGICO
Salimos de Yauyos pueblo bajando la pendiente del camino de trocha (la carretera está en construcción) hacia el camino asfaltado con rumbo a Huancaya. Antes teníamos que pasar por el pueblito de Vitis, era a media tarde cuando camino arriba divisábamos al pueblo en mención. Al entrar nos daba la bienvenida un portal construído en piedra y con un mirador hacia todo el valle, hermosa la vista. Pudimos llegar a observar a algunos condores volando la zona. Aquí aprovechamos para dar auxilio a la movilidad y para tomarnos algunas fotos.
Vitis es pequeño, melancólico, acogedor y hermoso. Predominantemente agrícola-ganadero, nos dió la impresión de que muy pocos habitantes tenía; y estábamos acertados ya que según el INEI(Instituto Nacional de Estadística e Informática) tiene 525 habitantes. Este pueblo también pertenece a la zona declarada como Reserva Paisajística. En el momento que llegamos a la plaza principal, llegaba un bus que venía de Yauyos. Aquí es donde algunos compramos pan de la zona, muy agradable por supuesto. Sus casas de adobe y calles empredadas, sus verdes y naturales paisajes como la Laguna de Piquicocha , la Marcatupe, la Quebrada de Pacaya, adornan este lugar en su totalidad.
Salimos de Yauyos pueblo bajando la pendiente del camino de trocha (la carretera está en construcción) hacia el camino asfaltado con rumbo a Huancaya. Antes teníamos que pasar por el pueblito de Vitis, era a media tarde cuando camino arriba divisábamos al pueblo en mención. Al entrar nos daba la bienvenida un portal construído en piedra y con un mirador hacia todo el valle, hermosa la vista. Pudimos llegar a observar a algunos condores volando la zona. Aquí aprovechamos para dar auxilio a la movilidad y para tomarnos algunas fotos.
Vitis es pequeño, melancólico, acogedor y hermoso. Predominantemente agrícola-ganadero, nos dió la impresión de que muy pocos habitantes tenía; y estábamos acertados ya que según el INEI(Instituto Nacional de Estadística e Informática) tiene 525 habitantes. Este pueblo también pertenece a la zona declarada como Reserva Paisajística. En el momento que llegamos a la plaza principal, llegaba un bus que venía de Yauyos. Aquí es donde algunos compramos pan de la zona, muy agradable por supuesto. Sus casas de adobe y calles empredadas, sus verdes y naturales paisajes como la Laguna de Piquicocha , la Marcatupe, la Quebrada de Pacaya, adornan este lugar en su totalidad.
Permanecimos muy poco tiempo, pero nos dejó el agradable sabor de hospitalidad, calma, quietud y nostalgia. Huancaya nos esperaba y teníamos que partir antes que la noche nos cubra.
Mañana: Huancaya
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