Viaje a Yauyos y alrededores (Parte 3)

MI EXPERIENCIA CON MIS AMIGOS EN YAUYOS

Son las dos de la madrugada y llego a la casa de Martín Pulpín, esa fue la hora indicada, pero para variar los amigos fueron llegando a la hora "Cabana", Miguel Gazú, fue el primero en llegar, después fueron los demás.

Salimos de todas maneras en la madrugada, como no había cochera para guardar el carro de Percy - él había venido desde su casa en su auto-, me animé a ofrecer mi cochera, así fuimos y dejamos el carro bajo siete candados.

Iniciamos el viaje y casi la mayoría se dedicó a dormir - Juanito Boliche fue el que sugirió que lo hagamos-, otros como Uribe, el búho, no dormía y estaba muy alegre ya que esa noche estaba durmiendo en un asiento confortable y no en su acostumbrada rama del árbol. Otro que se quedó muy dormido como piedra fue Mario Rocco, bueno así es él, pero tiene un corazón mas blando que la mantequilla. Percy quedó dormido de milagro y el que si no despertaba ni siquiera para pestañear era Martín Pulpin y es que tenia una noche entera sin dormir.

El pobre Julian tenía un dolor de cabeza que no lo dejaba con ninguna pastilla -se trajo media farmacia con él- , es más, solo le pasó el dolor cuando comió algo en Yauyos, sobre todo cuando merendó una ensalada de palta después de haber comido un fréjol con seco, que buena digestión del sambito.

Paco como siempre no podía dejar atrás su peculiar migraña, pero ya mas arriba , estaba muy alegre. Memín después de semejante almuerzo, se destapó e inicio su acostumbrada sección de fotos que ya sabemos es su deleite y también deleite de "lobo" que solo saca las fotos de Memín.

Juan Borea en todo momento fue nuestro protector, nunca dejó la batuta del control de todo, fue el líder y así lo demostró cuando el carro recalentaba, nos decía que adelantemos la ruta caminando cuesta arriba y a más de 3,500 metros de altura. Decía siempre que a la vuelta de una curva estaba Yauyos y es que la verdad que ya a Cesi Velasco se le salía el corazón por la boca, mientras que a Mario no le hacia mella nada, él estaba en la delantera más fresco que lechuga y el búho salió con su zapato de taco número 7 y regresó con un yankie ,ja,ja,... el pobre zapato no pudo resistir el soroche de la caminata, de la altura y menos del olor, ja,ja......allí no más murió el zapato e inició una nueva vida el par de zapatillas que trajo.

Decían que a Mario no se le gastaba la suela del zapato, ya que él le pone una laja de Arequipa como suela. Pulgarcito Contreras se atrevió a caminar y llegó al carro destrozado, es más, Miguel Gazú no quería caminar ya que le dolía la cabecita que se manejaba (mucho peso para el camino) ...jajaja....Es que la altura se sentía, en fin, caminamos en total de trocha en trocha casi 10 kilómetros.

Así después de viajar por mas de 12 horas -uff ufff-, llegamos a Huancaya. El sonido de las cascadas en la noche fue algo maravilloso, esa noche comimos con ganas y nos tomamos algo para el frío y también nos dimos un tiempo para poder tratar temas relacionados con el blog y otras cosas. Todos estuvieron de acuerdo en que se den las correcciones del caso.

Esa noche, fue sui generis; unos buscaron su pareja para compartir la habitación que era de dos camas. Paco y el negro Julián fueron la pareja más batida de la noche; Percy y Humberto; Rocco y Daniel que no lo dejo dormir porque hacia mucho ruido, parecía un aserradero en producción ,ja,jajaja,..Contó después Rocco que él sufre de insomnio, pero ya con Daniel al lado , se las paso en vela.....ja,ja...Percy que se levantó sin zapatos en plena madrugada para ir al baño requintando a sus espíritus y que los del primer piso lo escucharon como maldecía su suerte y se reían, luego retornó al cuarto y se moría de frío ya que la temperatura a esa hora era de 4 grados centígrados.

Unos prometieron levantarse muy temprano para ir a pescar truchas, pero eso solo fue un sueño de opio, nadie se levantó. El Buho Tomás apareció aleteando a las 6 am. preguntando por los "pescadores" y al no encontrar a nadie se guardó en su arbol.

En la mañana nos sirvieron un suculento desayuno consistente en tres panes con queso de rica leche de vaca sana y feliz, mate de hoja de coca y otros el famoso café pasadito que tenia un olor entre café y leña, pero algo nuevo de deleitar al paladar. La dueña de la posada nos dijo que desde las tres de la mañana estaba hirviendo para el almuerzo la sopa de mote con cordero y mondongo todo echo a la leña. Me comprometí enseñar a la familia Crispín (dueña del local) el poder hacerles una tortilla española pero agregándole trucha -el pez de río de carne deliciosa y parecida al salmón- . Según pude comprobar después, salió muy buena y fue del agrado de muchos que también deseaban saber como se hacía. Ese día almorzamos comida novoandina, siendo una mistura entre lo español con lo autóctono.

Después del desayuno salimos a conocer las cataratas y lagunas, fue algo muy hermoso. Algo que no se puede describir, ni en foto ni en películas. Lo que las personas deben de realizar es hacer un tiempo en sus vidas e ir personalmente a visitar Huancaya, vale la pena ya que es la naturaleza viva, fauna y flora conviviendo entre si. Los pobladores de esta ciudad respetan la naturaleza, claro, ya que ya se ve que el ser humano esta llegando más y más por esos lares -sobre todo los foráneos-, porque se observan algunos plásticos y papeles al comienzo de la reserva. Les recomiendo hacer este viaje, no se arrepentirán ya que además la comida y el hospedaje son baratos y excelentes.

Ya en otro articulo contaré las anécdotas que sucedieron y que nos hicieron delirar hasta las lágrimas. A Percy, Uribe, Humberto, Paco, etc. pero eso fue después de parar en Lunahuana.

Un abrazo cordial y fraterno a todos.....
su amigo de siempre

Humberto Barreto desde Lima, Perú